La danza de la mudanza: siéntase en casa desde el primer día

La danza de la mudanza: siéntase en casa desde el primer día

Mudarse es un proceso que genera ansiedad: luego de intentar controlar a un equipo de embaladores, asegurando que todas sus pertenencias se hayan empacado adecuadamente, a quien se muda le espera aún ver que todo quede ubicado correctamente y pasar al desembalaje. Reflexiones para que su ánimo no decaiga y su nueva casa empiece a ser un hogar rápidamente.

Convertir la carga de la mudanza en un proyecto divertido sólo requiere de un proceso de reajuste y apertura mentales hacia el “lado positivo”. Para el ser humano, habitar un espacio es una forma de afianzarse en el mundo, de transmitir algo de su ser más intimo a una estructura de protección e integración familiar; no se trata sólo de la función de poner un techo sobre la cabeza. Planear, disponer y reacomodar los muebles es una manera de mostrarle a su familia y allegados su visión del mundo.


Se debe tener en cuenta dos cosas a la hora del trabajo duro: de una parte, que las cajas que no se abran son una forma de presión para avanzar, pues no hay nada tan aburridor como vivir en medio de un trasteo; y de otra parte, que Roma no se construyó en un día. Téngase paciencia y anímese, pues si vale la pena tener un ambiente bonito, cómodo y funcional para vivir, vale la pena trabajar por ello.


Ubique los muebles del área social rápidamente. Conformar ese espacio en el cual poder relajarse con algunos amigos que vengan a ayudar puede hacer una diferencia emocional muy grande a la hora de enfrentar la tarea de rehacer la casa. Para quienes viven solos, los muebles de la sala son una especie de compañeros y confidentes silenciosos: ellos los reciben cuando llegan del trabajo, los arrullan si se quedan dormidos leyendo, y los reconfortan cuando están tristes. Quiéralos mucho y acomódelos rápido.


Su cuarto es su santuario. Ese lugar al que sólo entra quien lo merece, ese lugar donde su voluntad es ley, ese lugar donde sus sueños nacen, debe ser consagrado a su descanso y a su placer tan aceleradamente como le sea posible. Arme de nuevo su cama el mismo día que llegue y no deje cajas sueltas allí. Siempre que necesite tener privacidad durante el proceso de mudanza, su refugio estará listo para usted. Descabezar un sueñito apenas se han ido los ayudantes del trasteo es uno de esos placeres minúsculos y secretos que tiene la vida: prepare su habitación para disfrutarlo.


Nevera llena, corazón contento. Un hogar es un sitio en donde se cocina y se come en familia, el lugar para celebrar el estar juntos en esa pequeña ceremonia íntima y cotidiana de sentarse a la mesa. No se rinda ante las comidas rápidas en esos primeros días de la mudanza; aprovisiónese de los ingredientes necesarios y de paso aliste el menaje de cocina para poder ofrecerse un menú casero que restituya el espíritu familiar en ese periodo de transición abrupta tras el trasteo.

Verde que te quiero verde. Las plantas son uno de sus mejores aliados en hacer de su casa un hogar. Si le gustan las flores, una buena idea es armar un florero rápido y sencillo para la sala, como una forma de afirmar su presencia en el hogar. Las plantas y flores crean una atmósfera cálida y acogedora con muy poco esfuerzo.

Con esos consejos, ¡bienvenidos a su nueva casa!

Fuente: Viva Real